Rendimos homenaje a Jaime Garzón, un genio de la sátira y el humor que, con sus personajes inolvidables, desafió al poder y nos invitó a reflexionar sobre la realidad de nuestro país. Desde su trágico asesinato, el 13 de agosto de 1999, a manos de un grupo de paramilitares bajo las órdenes de Carlos Castaño, el panorama colombiano cambió para siempre. La voz de Garzón, que representaba a quienes no tenían voz, fue silenciada por su valentía al cuestionar la corrupción y ridiculizar al poder.
Jaime Garzón era un rebelde en el mundo del entretenimiento, conocido por sus icónicos personajes como Heriberto de la Calle, Néstor Eli, Dioselina Tibana, Inti de la Hoz y Emerson de Francisco, entre otros. A través de ellos, ofrecía una crítica mordaz y humorística de un país gobernado por una fauna política tan diversa como contradictoria. Sus creaciones no solo entretenían, sino que también invitaban a la reflexión sobre la realidad social y política de Colombia.
El impacto de Garzón en la televisión fue revolucionario. Sus entrevistas con Heriberto de la Calle desafiaron a los poderosos, brindando una perspectiva que muchos encontraron refrescante, aunque dolorosa. Con su ingenio, logró cambiar los paradigmas televisivos, ofreciendo una manera única de reírse de una tragedia nacional que parecía interminable.
Desde nuestro medio de comunicación, rendimos homenaje al genio de Jaime Garzón y, como medio comprometido con la libertad de expresión, hacemos un llamado al Estado para que proteja el ejercicio periodístico y respete el oficio más noble del mundo. Concluimos con una frase de Garzón que resuena con fuerza: “Si ustedes, los jóvenes, no asumen la dirección de su propio país, nadie va a venir a salvarlo. Nadie”. — 1libre como tu–
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