Rumanía enfrenta una crisis hídrica sin precedentes, con una sequía prolongada que ha llevado al racionamiento del suministro de agua en diversas regiones. La falta de lluvia en los últimos años, sumada a canalizaciones con pérdidas, ha agravado la situación, obligando a las autoridades a implementar cortes de agua diarios.
Condado de Iași: Uno de los más afectados
En el condado de Iași, las altas temperaturas veraniegas han dejado a miles de personas con acceso limitado al agua, disponible solo unas pocas horas al día. Esta medida se mantendrá al menos hasta el final del verano. Gheorghe Savin, un vecino de Cotnari, comparte su frustración: “Desde 2002 he construido tres pozos y todavía no tengo agua. Ahora, en la cuarta inversión que hemos obtenido de ellos, solo para tener agua y todavía estoy sin agua”.
Otra residente de Cotnari nos muestra su realidad: “Son dos baldes de agua, más dos garrafas de cinco litros en el baño. Si no, me subo al coche y voy a buscar agua. Antes no teníamos este problema, pero en verano… El verano pasado también fue duro, pero no tanto como este”. Los pozos que antes proveían agua suficiente ahora apenas logran llenar un simple cubo, evidenciando el descenso crítico en el nivel del agua subterránea.
Apoyo municipal y la importancia de cada gota
Ante esta situación, muchos recurren a las autoridades municipales en busca de agua. La entrega diaria de agua se ha vuelto esencial para sobrevivir las temperaturas extremas. Cada gota cuenta en este escenario de escasez.
Una sequía prolongada: signos de alerta desde hace años
La crisis actual no es una sorpresa aislada de este verano. Los síntomas de una sequía severa se han observado en años anteriores. En 2022, el lago Techirghiol, el mayor lago de agua salada del país, retrocedió unos 50 metros debido a la falta de precipitaciones. Este lago es famoso por el barro terapéutico utilizado en el tratamiento de diversas enfermedades.
Ese mismo año, el nivel del agua en el Delta de Moldavia descendió un metro debido a la extrema sequía. Estos eventos han sido precursores de la grave situación hídrica que enfrenta Rumanía hoy en día.
Conclusión
La sequía en Rumanía ha llegado a niveles críticos, afectando la vida diaria de miles de personas. Las medidas de racionamiento y el apoyo municipal son fundamentales para enfrentar esta crisis, mientras la nación espera la llegada de mejores condiciones climáticas y soluciones sostenibles a largo plazo.– euronews–
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