El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha concedido el perdón presidencial a su hijo, Hunter Biden, quien enfrentaba cargos por posesión ilegal de armas en Delaware y evasión fiscal en California. La decisión, anunciada este fin de semana mediante un comunicado oficial, ha generado reacciones divididas en el ámbito político y social, especialmente después de que Biden asegurara en el pasado que no intervendría en los procesos judiciales de su hijo.
En su declaración, Biden argumentó que Hunter fue víctima de un “proceso judicial selectivo e injusto”, influenciado por la presión de sus opositores políticos. “Está claro que Hunter fue tratado de manera diferente”, afirmó el mandatario, señalando que los casos surgieron tras esfuerzos de sus adversarios en el Congreso para desacreditarlo.
El presidente también destacó que el acuerdo inicial de culpabilidad, aprobado por el Departamento de Justicia, fue desechado en la sala del tribunal, un hecho que atribuyó a presiones políticas. “Al intentar acabar con Hunter, han intentado acabar conmigo”, expresó, reiterando que el trato hacia su hijo fue influenciado por su relación familiar.
Fechas clave en los casos judiciales
El indulto llega en un momento crucial, pues la sentencia de Hunter Biden por los cargos de armas estaba programada para el 12 de diciembre, mientras que el 16 de diciembre sería juzgado en un caso separado por evasión fiscal, tras haberse declarado culpable en septiembre.
Biden cerró el comunicado subrayando su confianza en el sistema de justicia estadounidense, aunque lamentó que “la política cruda infectó este proceso”. Según el presidente, la decisión fue tomada para evitar mayores demoras y en un intento por corregir lo que considera un error judicial.
La medida ha provocado intensos debates en el Congreso y entre la opinión pública, dividiendo a quienes la ven como un acto de protección paterna y quienes la critican como un uso indebido del poder presidencial. –Caracol Radios–
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