La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) ordenó la suspensión inmediata de actividades de una chatarrizadora ubicada en zona urbana del municipio de Soacha, debido a los graves impactos ambientales identificados en el predio. La medida se tomó tras evidenciarse la generación de residuos peligrosos y la afectación al paisaje por la acumulación desordenada de productos y subproductos al aire libre.
Un equipo técnico de la dirección regional Soacha de la CAR realizó una inspección en el lugar, donde se llevaba a cabo la desintegración física de vehículos de todo tipo. Durante la visita, se constató que los residuos y materiales provenientes del proceso de chatarrización eran dispuestos de manera inadecuada, sin criterios de circularidad o reúso, lo que representa un riesgo para los recursos suelo y aire. Además, se determinó que el predio no es compatible con este tipo de actividad según el Plan Básico de Ordenamiento Territorial.
César Augusto Rico Mayorga, director regional de la CAR en Soacha, explicó que “la decisión es de ejecución inmediata, y se aplica sin perjuicio de las sanciones a que haya lugar. Su incumplimiento será causal de agravación de la responsabilidad en materia ambiental”. El funcionario también destacó que la acumulación desordenada de materiales al aire libre rompe la armonía del entorno natural, generando un impacto visual negativo en el paisaje.
La CAR impuso esta medida preventiva mientras avanza en la elaboración de un informe técnico que permitirá determinar si existen otros impactos ambientales adicionales. Dependiendo de los hallazgos, se podrían imponer nuevas sanciones a los responsables de la chatarrizadora.
Con esta acción, la CAR reafirma su compromiso con la protección del medio ambiente y el cumplimiento de la normativa ambiental en la región, garantizando que las actividades económicas no pongan en riesgo los recursos naturales ni la calidad de vida de los habitantes.—Prensa Car—
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