Una noche de fútbol en el barrio Barra do Ceará, en Fortaleza, capital del estado de Ceará, se convirtió en escenario de una tragedia que ha conmocionado al país. Cuatro personas, entre ellas un menor de edad, fueron asesinadas a quemarropa el pasado martes mientras participaban en un partido de fútbol, según informaron fuentes oficiales.
El ataque ocurrió cuando un grupo de hombres armados, algunos vestidos con uniformes falsos de la Policía, irrumpió en la cancha y abrió fuego indiscriminadamente contra los presentes. Las víctimas, de 16, 18, 19 y 22 años, fallecieron en el lugar, mientras que otras personas resultaron heridas. Entre los fallecidos se encuentra Pedro Henrique da Silva, un adolescente de 16 años que soñaba con convertirse en futbolista profesional, según medios locales.
La Policía detuvo a cuatro sospechosos, incluyendo a un adolescente de 15 años. Tres de los adultos arrestados, de 18, 19 y 22 años, tienen antecedentes por delitos como tentativa de homicidio, robo y narcotráfico, lo que ha llevado a las autoridades a investigar posibles vínculos con el crimen organizado.
Testigos relataron momentos de pánico cuando los disparos interrumpieron el juego, obligando a jugadores y espectadores a huir o buscar refugio. La brutalidad del ataque ha generado indignación y ha reavivado el debate sobre la violencia en Brasil, especialmente en eventos comunitarios como los partidos de fútbol amateur.
Las autoridades continúan investigando los motivos detrás de este acto violento, mientras la comunidad de Barra do Ceará llora la pérdida de vidas jóvenes y pide justicia. Este trágico suceso se suma a otros casos de violencia en el fútbol brasileño, recordando la necesidad de medidas para garantizar la seguridad en espacios deportivos. —Gol Caracol—
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