La ampliación de la vía Bogotá-Girardot, un proyecto crucial para mejorar la movilidad en esta importante arteria vial, está mostrando avances significativos. Actualmente, el proyecto, gestionado por la concesión Vía Sumapaz, ha alcanzado un avance del 54% y se estima que estará completado durante el primer semestre de 2025. Esta obra incluye la construcción de un tercer carril en los 145 kilómetros de la vía, divididos en ocho tramos.
La aceleración en la ejecución de la obra se debe en gran medida a la incorporación de una planta de asfalto propia en Fusagasugá (Cundinamarca). Esta planta no solo asegura un suministro constante de material asfáltico, sino que también utiliza mezclas recicladas de la antigua vía, lo que contribuye a la sostenibilidad ambiental del proyecto.
Cristian Parga, ingeniero de la planta, explicó que se está utilizando un 30% de asfalto reciclado, conocido como RAP, en las nuevas mezclas. Este proceso implica la reincorporación de material reciclado en la producción de asfalto, reduciendo así el consumo de recursos naturales y minimizando el impacto ambiental.
La planta de asfalto, con capacidad para producir más de 1.000 toneladas diarias, juega un papel clave en la optimización de los tiempos de construcción. En los próximos meses, se espera que esta capacidad se duplique, lo que permitirá una entrega más ágil del proyecto y contribuirá al cumplimiento de los plazos establecidos.
Además de la planta de asfalto, la obra ha avanzado con la ampliación y construcción de puentes, como el viaducto del Muña y el puente de Tolemaida, ya completado. Estos avances son parte de un esfuerzo integral para garantizar que el tránsito en la vía sea más eficiente y seguro para los viajeros.
La concesión Vía Sumapaz y sus aliados están comprometidos con la finalización oportuna de esta obra, que promete transformar la experiencia de viaje en uno de los corredores viales más importantes del país.–Rcn Radio–