El Ministerio de Salud de Colombia ha dado un paso atrás en una controversial propuesta legislativa que, según críticos, permitiría la práctica de “disolver cadáveres” como una alternativa para la disposición final de restos humanos. La iniciativa, que generó amplio debate en la opinión pública, fue presentada como parte de un proyecto para modernizar las regulaciones sobre manejo de cuerpos en el país.
La propuesta incluía la técnica conocida como hidrólisis alcalina, un proceso químico que descompone el cuerpo humano en componentes líquidos y óseos, considerado por algunos como una alternativa ecológica a la cremación o el entierro tradicional. Sin embargo, la falta de claridad en la redacción del proyecto y la percepción de que se estaba promoviendo una práctica poco comprendida desataron críticas y preocupaciones entre diversos sectores, incluyendo organizaciones religiosas y ciudadanos.
Tras la controversia, el Ministerio de Salud anunció que revisará la propuesta para garantizar que cualquier cambio en la legislación sea ampliamente discutido y cuente con el respaldo de la sociedad. “No se trata de imponer prácticas, sino de abrir un diálogo sobre opciones sostenibles y respetuosas para la disposición de restos”, señaló un vocero del Ministerio.
Expertos en bioética y ambientalistas han destacado que la hidrólisis alcalina, aunque novedosa en Colombia, ya se utiliza en países como Estados Unidos y Canadá, donde se promueve como una opción menos contaminante. No obstante, reconocen que su implementación requiere una regulación clara y una campaña de información para evitar malentendidos.
El debate sobre esta propuesta ha puesto en evidencia la necesidad de un consenso social y técnico antes de introducir cambios en un tema tan sensible. Por ahora, el Ministerio de Salud ha asegurado que trabajará en una nueva versión del proyecto, incorporando las opiniones de la ciudadanía y expertos para evitar controversias futuras.—Fuente: BluRadio—
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