Cajicá, 23 de agosto de 2025 — El Gimnasio Campestre Los Laureles, en Cajicá, Cundinamarca, donde desapareció la menor Valeria Afanador Cárdenas el pasado 12 de agosto, anunció nuevas medidas de seguridad para garantizar la protección de sus estudiantes y confirmó el regreso a clases presenciales a partir del próximo lunes. La institución, marcada por la incertidumbre tras la desaparición de la niña de 10 años con síndrome de Down, busca recuperar la confianza de la comunidad educativa.
Según un audio filtrado de una reunión entre directivos y padres de familia, publicado por Chía Radio, el colegio implementará un sistema de videovigilancia ampliado, con monitoreo continuo las 24 horas del día, y reforzará la seguridad con patrullajes de motorizados cada dos horas, tanto en el plantel como en sus alrededores, especialmente cerca del río Frío. Estas medidas responden a las preocupaciones expresadas por los padres, quienes manifestaron temores sobre la seguridad de sus hijos tras el incidente.
Una madre, en el audio, expresó su inquietud: “Agradezco al colegio por estos años, pero soy una de las mamás que tiene miedo. Mi hija me decía esta mañana: ‘Mamá, ¿cómo voy a hablar con mis amigos? ¿Y los trillizos, hermanos de Valeria, estarán en el salón?’”. Los directivos aseguraron que agilizarán los protocolos de seguridad y contarán con apoyo gubernamental, además de brindar acompañamiento psicológico a los estudiantes, especialmente a los hermanos de Valeria, para facilitar su reintegración.
La desaparición de Valeria, vista por última vez en una zona de arbustos cerca de una reja colindante con el río Frío, ha movilizado a más de 200 rescatistas, incluyendo Policía, Ejército, Bomberos y el CTI, quienes han descartado en un 95% la posibilidad de que la menor haya caído al río. La búsqueda se ha extendido a un radio de seis kilómetros, y las autoridades ofrecen una recompensa de 70 millones de pesos por información que permita ubicarla. La madre de Valeria, Luisa Cárdenas, descartó la hipótesis de un secuestro por un desconocido, manteniendo la esperanza de encontrarla con vida.
A 12 días de la desaparición, el caso sigue sin respuestas concretas, pero el colegio trabaja para restablecer la normalidad mientras la comunidad espera avances en la investigación. Las clases, que iniciaron de forma virtual el 19 de agosto, volverán a la presencialidad con medidas reforzadas para garantizar un entorno seguro.
—Fuente:El Tiempo—
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